LA FOTOGRAFÍA COMO DOCUMENTO SOCIAL- GISÈLE FREUND

La fotografía y el desarrollo social se ven fuertemente vinculados. Actualmente desempeña un papel capital ya que casi no existe actividad humana que no la emplee de algún modo. Fuera del desempeño que tiene la cámara en la vida cotidiana, la fotografía se volvió indispensable para la ciencia y la industria. En la vida cotidiana esta se ha visto inmersa y ya no se le advierte. Es un acompañante leal y fiel. 

La fotografía no sólo reside en el hecho de que es una creación sino que altera la percepción de la realidad ya que el carácter de la imagen se ve determinado por la manera de ver del operador. No existe tal cosa llamada imparcialidad del ojo, a través de la imagen se halla una herramienta capaz de moldear nuestras ideas y comportamiento. Me parece increíble la manera en la que nos vemos influenciados y confiamos en nuestros sentidos.

Al principio la fotografía cumplía el papel de la representación más cercana a la realidad a través del retrato. El retrato, en sus inicios, tuvo cualidades que fueron consideradas artísticas hasta que el fotógrafo tuvo la necesidad de adaptarse al gusto del público, como por ejemplo la tarjeta de visita de Disderi. Fue un proceso largo para que la fotografía fuera aceptada como una forma de arte. Durante todo este proceso la mayoría de los artistas le negaban a la fotografía la dignidad de ser considerada arte, solamente los artistas considerados de “media talla” lograron aceptar el oficio y llevaron a cabo dicha labor.

A lo largo de su proceso evolutivo la fotografía actuó como el medio adecuado para la reproducción de la obra de arte. Esto fomentó la masificación de las obras de arte, las obras desconocidas para la mayoría de la población ahora podían ser vistas por millones de personas.

Otro factor de suma importancia es el de la incorporación de la imagen fotográfica a la prensa, siendo esta capaz de manipular al público. Cambiando así la visión de las masas, abriendo esta una ventana al mundo. La fotografía de prensa inaugura la era de los mass- media visuales. El nacimiento del foto-periodismo queda situado en Alemania después de la primera Guerra Mundial y consistía en hacer fotos aisladas para ilustrar una historia.

El significado de la fotografías puede ser alterado, dándole posiblemente un sentido completamente opuesto. La objetividad de la imagen no es más que ilusoria. El uso de la imagen fotográfica puede ser un falsificante de los hechos en cuestión. En otras ocasiones los fotógrafos llegan a autocensurarse y no muestran lo que es en realidad en dado caso que el tema en cuestión no sea algo de interés o agrado para el periódico que lo publicará o ya sea para el mismo mismo gobierno, etc. La fotografía de escándalo puede llegar a tener un gran imparto visual.

Por otra parte, Giséle Freund distingue dos grandes corrientes dentro de la fotografía contemporánea: Los fotógrafos comprometidos por problemas humanos y sociales y la fotografía como medio de realizar sus aspiraciones artísticas personales.